16 marzo 2008

Iván Ferreiro en Gazteszena


Nosolopop

Por RUTH PÉREZ

Fecha y lugar.
13/03/08. Gazteszena. Donostia.
Intérpretes. Iván Ferreiro (voz, guitarra, sintetizadores), Amaro Ferreiro (guitarra), Emilio Saiz (guitarra), Pablo Novoa (bajo), Ángel Luis samos (teclados) y Tony Toledo (batería).


HABÍA dos posibilidades. No seamos roñosos: había, al menos, tres. Opción A: que fueras un incondicional de Iván Ferreiro, de los que no sólo pueden deletrear hasta el último verso de sus dos discos anteriores, sino del que aún no ha salido a la venta y está disponible desde esta semana en Internet. Opción B: que te sedujera el sonido de su ex grupo, Los Piratas y hubieras escuchado un par de canciones del músico vigués en solitario y no te disgustaran. Opción C: que pertenezcas a ese grupo no poco numeroso que concede una oportunidad a casi todas las citas programadas en la sala Gazteszena. Para todos, pero sobre todo para los terceros, Ferreiro no se limitó a desgranar el pop de cadencia suave y desgarrado al que muchos asocian su imagen, sino que también emergieron temas más agresivos -"guarros", según su propia definición- para que los no iniciados descubrieran un directo poderoso -¿cuál no lo es?- y solventes pinceladas de rock progresivo. Los integrantes de las opciones A y B, por su parte, respondieron entusiasmados a la oferta, pese a que no hubo promesas, ni cocos, ni años 80.

En el repertorio no hubo, pues, espacio para la nostalgia, entre otras cosas porque pese a que sólo acumula tres años en solitario, Ferreiro cuenta con un bagaje de una treintena de canciones propias con las que desenvolverse sobre el escenario. Y la apuesta no le sale nada mal: aunque iniciaba gira en Donostia, con un disco apenas divulgado, el aforo de la sala de Egia quedó prácticamente cubierto, y entre la masa había gente muy muy joven que obligaba a pensar que Ferreiro les ha conquistado en su etapa post-pirata. Por cierto, sus teloneros, los coruñeses Stereotipos, gustaron en Donostia, especialmente con Seis grados bajo cero y un tema que les ha regalado Quique González.

Arropado por su hermano Amaro, Ferreiro abrió fuego con sus nuevas composiciones y hubo quien ya había estudiado la lección -"una a una, cada día"- y coreó el tema que da título al último disco (Mentiroso, mentiroso ) y del primer corte (Toda la verdad ). De su disco de presentación en solitario, Las siete y media , triunfaron La distorsión y la espléndida Extrema pobreza ; del álbum Canciones para el tiempo y la distancia , sonaron eficaces SPNB , El viaje de Chihiro , Estrella de la muerte -"a mí me encanta, pero sé que tiene detractores", confesó el cantante- y la imprescindible Turnedo . Hubo dedicatoria a un habitual de su blog -vecino de Intxaurrondo, para más señas-, momento íntimo con los teclados y bises generosos, a voluntad del personal.

Poeta contundente y elegante, el músico de Vigo se vació en el concierto y trasladó la convicción que cobijan sus letras a su actitud en el escenario. Ahora que el mercado discográfico ha entrado en una crisis definitiva y las unidades de medida deben modificarse, Ferreiro puede estar satisfecho de lo que se intuía a la salida del concierto: entre las opciones A, B y C, 200 discos vendidos en una noche.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

menudas fotos!

El Humilde Fotero del Pánico dijo...

¡Gracias, maja!

A. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
A. dijo...

Soy Alba (de nuevo)
qué casualidad, te agregué a flickr sin saber que estas fotos eran tuyas

soy ciudadana_a
quizá te suene
ciao!